Tomar la decisión entre dejarse llevar por el diseño y la excelencia visual a la hora de reformar o decorar la casa o tirar por la vía de lo práctico y lo funcional puede ser un auténtico problema, pero lo cierto es que ambos conceptos pueden convivir en un mismo inmueble si se ejecutan correctamente, ¿sabes cómo tener una vivienda moderna y estética sin renunciar al lado práctico?
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El diseño actual con las últimas tendencias y materiales
Una de las claves de la convivencia es la de escoger un diseño actual cuando vayas a reformar o decorar tu casa, ya que las últimas tendencias suelen ser las más avanzadas en cuanto al uso de materiales y técnicas enfocadas a la comodidad: los diseños más rompedores de antaño son generalmente más incómodos pese a la creencia popular.
Suele decirse que ya no se fabrican cosas con tanta calidad como antes o que los materiales de otras épocas son mucho mejores, pero lo cierto es que gracias a los avances en las tecnologías los utensilios bien diseñados pueden ser mucho mejores hoy en día, en algunas ocasiones la vida útil es algo menor porque algunos avances quedan obsoletos y sencillamente se lanzan al mercado versiones mejores.
Lo útil, cómodo y clásico que nunca falla
Hay ciertos materiales, conceptos o muebles que sencillamente no pasan de moda jamás y son de lo más cómodo y útil; una buena forma de crear espacios en los que conviva lo estético con lo práctico es acudir a estos conceptos clásicos que conservan el atractivo aunque cambien las modas de cada momento.
Un buen ejemplo es el uso de ciertos materiales como la madera que siempre queda bien y es un material de calidad que promete aguantar bien el paso del tiempo aportando un mantenimiento sencillo, otra buena opción es utilizar el estilo industrial en las cocinas ya que los metales son neutros y nunca dejan de ser tendencia a la vez que aportan calidad a todos los componentes de esta habitación.
Haz reformas y obras con estrategia a largo plazo
Si vas a meterte en una reforma importante lo mejor es no dejarse llevar por la impulsividad y por las necesidades concretas del momento ya que puedes tomar una decisión que condicione el diseño por muchos años, un diseño que tal vez no esté de moda o no se guste en poco tiempo, y a su vez comprometer la facilidad de uso o tránsito en la casa.
Lo mejor será apostar por ampliar los espacios o crear la mayor sensación de amplitud posible así como tomar decisiones a largo plazo, así que si por ejemplo cabe la posibilidad de que la familia se amplíe en un futuro tomarlo en cuenta para no quitar habitaciones en las reformas, no limitar el espacio o no deshacerse de un cuarto de baño que después se echará de menos.
Crear zonas útiles y espaciosas que puedan ser vestidas con muebles o electrodomésticos de calidades demostradas pueden ser factores determinantes para una estupenda convivencia entre lo visual y lo pragmático, ¿acaso no es lo más cómodo del mundo arroparse en una mecedora que a la vez aporta ese toque retro tan atractivo?
